Google es una empresa joven y muy exitosa. Aunque pueda parecer que lleva con nosotros desde los inicios de la informática personal no hace ni dos décadas que la compañía de Larry Page y Sergei Brin se mueve dentro de nuestros ordenadores.
Su primer producto fue el buscador, el mejor que había en el momento y posiblemente el mejor que hay hoy. Pero aunque eso fuera el origen en Google saben bien que no es el futuro de la empresa.
Movimientos como la compra de Android en 2005 o el poner el foco en la Inteligencia Artificial como anunció Sundar Pichai en 2017 son solo dos ejemplos de cómo la compañía, ahora parte de Alphabet, se reinventa una y otra vez. Y estamos a las puertas de un nuevo cambio.
Google apostará por el hardware
Aunque a este logotipo tan conocido siempre lo hemos asociado con una empresa de software cada vez es más relevante que la firma estadounidense mira con hambre al mercado del hardware. Esto no es un secreto, su propio CEO lo ha remarcado en ocasiones, pero es algo que hay que tener muy presente.
Es por eso que ha realizado una fortísima inversión para comprar parte de HTC, algo que hace poco ha sido ejecutado. Esos cientos de ingenieros que otrora trabajaran para la empresa asiática ahora son parte de Google.
El motivo podría ser uno bastante obvio: es bueno estar cerca de las fábricas de la mayoría de productos electrónicos del mundo y esa división de Google se enfocará más que probablemente al hardware.
Dotando de inteligencia a las cosas
La segunda parte clave de cualquier dispositivo tras su fabricación es el interior, el software. Ahí Google tienen mucha más experiencia pero está entrando en un nuevo terreno en el que no es que no haya bregado antes, es que casi ninguna empresa lo ha hecho.
La Inteligencia Artificial será algo clave. El propio Pichai llego a afirmar que será más relevante para la humanidad que el descubrimiento del fuego o de la electricidad. Una afirmación osada donde las haya.
El cambio de Google de una empresa de ordenadores a los móviles es algo que vemos ya con retrospectiva. Android lleva más de una década entre nosotros y parece obvio que la movilidad es su hábitat natural.
Pero ahora estamos ante un nuevo cambio y el gigante del inter no quiere alejarse. Para ello no descartará los smartphones, y los últimos Pixel 2 y Pixel 2XL son un buen ejemplo, pero serán unos dispositivos más, no los únicos.
Google para el hogar
La domótica es un apartado de la tecnología que lleva con nosotros mucho tiempo. La hemos visto en películas, libros y también podemos disfrutarla a diferentes niveles.
La Empresa ya tiene una plataforma en Google Home capaz de gestionar la instalación inteligente de nuestras casas y este es el mejor ejemplo de lo que busca. Sí, también tenemos Google en el coche o en el reloj pero después del móvil (por ahora) el ámbito más importante será la casa.
Para desarrollar este ecosistema Google necesitará ampliar su capacidad de creación, de diseño y de producción de nuevos aparatos, algo para lo que parece indicada la compra de parte de HTC.
Los Google Home son un gran paso pero aún queda mucho por hacer y Google no va a esperar. De hecho justo por eso compró Nest, la empresa de Tony Fadell, uno de los responsables del mismísimo iPod. Y no fue la única adquisición en este sector, también se hizo con Dropcam.
Made For Google
Otro ejemplo que destaca esta idea es la creación del proyecto Made For Google. Que entiende a la marca como un ente propio para el que otros pueden fabricar.
Se decidió eliminar de la tienda de Google en el Play Store cualquier producto que no estuviera fabricado por google.
Hay países en los que hay móviles y Chromecasts, como España. Otros en los que además hay altavoces inteligentes. Pero lo importante es que, en ninguno, hay algo que no sea de Google.
Y habrá nuevos aparatos que nos van a sorprender. Productos como las Google Clips o los Google Pixel Buds son los ejemplos perfectos de hacia dónde va la empresa.
Tiendas propias
Dentro de esa nueva dinámica es necesario crear tiendas propias para vender sus productos. La empresa ya ha estado experimentando en este sentido aunque aún no tenga un plan desarrollado a nivel mundial.
Adiós Android, Hola Fuchsia
A corto plazo la importancia de Android es vital para Google pero en el futuro ya no está tan claro. Su proyecto Fuchsia parece ser la apuesta de la empresa para dotar de inteligencia no solo a móviles, sino a todo tipo de aparatos, y hacerlo desde la base, sin necesidad de crear versiones del sistema sobre la marcha.
El desarrollo de un nuevo sistema no es algo sencillo, de hecho es algo realmente complejo. Ni con la experiencia de Google será un proyecto rápido y es por lo que parece que no avanza.
El ecosistema de Google
En los entornos tecnológicos hablar de ecosistema se ha convertido casi en un cliché pero pocas empresas, si es que hay alguna, puede hacerle sombra a Google a tantos niveles. Quizás sí que pueda la propia empresa, si no tiene cuidado y comete fallos como los que hemos visto en el Pixel 2 XL y la pantalla más impactante, y no en el buen sentido, de 2017.
La compañía está en posición de convertirse en la más relevante del mundo para millones de personas. No, aún no lo es, pero es solo cuestión de tiempo.